En The Octopus Job tenemos claro que ser multipotencial no es un fallo, sino más bien un puntazo. Pero tenemos que admitirlo:
Ser multipotencial en una sociedad que valora la especialización, la estabilidad y llevar trayectoria de vida lineal no es un camino de rosas.
Nos encontramos ante muchos mitos, prejuicios y obstáculos acerca del trabajo, de nuestra identidad y de nuestra valía como personas. Y lo que es peor: se cuelan en las expectativas que los demás tienen de ti e incluso en lo que tú esperas de ti mismo.
Son ideas que nos hacen sentir como bichos raros y, a veces, nos cuestan nuestro bienestar. Pero que no cunda el pánico.
En este artículo desmontamos 10 ideas equivocadas que deberías quitarte de la cabeza para aprovechar tu diversidad y tener una vida satisfactoria.
¿Ready? Pues sigue leyendo que ahí van:
1. No puedes ser multipotencial en la era de la especialización
Hoy en día lo que se lleva es saber mucho de un trocito muy pequeño de conocimiento, centrarte en él sin interactuar mucho con otras áreas y contribuir para mejorarla. Por ejemplo, si estudias en la uni después vendrá el máster y quizá hasta el doctorado.
Resetea: ser multipotencial es tan importante como estar especializado en algo.
Todas las personas, sistemas y profesiones dependen unos de otros y se relacionan entre sí de forma compleja. Hace falta personas “conectoras” que controlen de varias áreas a la vez, entiendan cómo interaccionan entre ellas y ayuden a otros a entenderlas y mejorarlas.
2. Si no te pagan por lo que haces no es importante
Lo único que vale la pena y es una parte relevante de tu vida y tu personalidad es lo que haces para ganarte la vida. Si aquello a lo que dedicas tu tiempo no te da dinero, es accesorio.
Si eres multi y alguna vez has dedicado alguno de tus conocimientos profesionales a ayudar a otros de manera altruista en proyectos sociales o voluntariados, seguro que alguna vez familiares o conocidos te han soltado eso de ¿pero te están pagando por hacer eso?.
Resetea: tus proyectos paralelos, experimentos, hobbies o intereses tienen valor independientemente de si son remunerados o no. Lo importante es el sentido que te aportan y tu decides en qué medida son una parte importante de ti.
3. Eres multipotencial porque aún no has encontrado tu propósito
“Descubre tu verdadera vocación” es una de las ideas más repetidas dentro del ámbito laboral. La vocación se entiende como ese algo que hay que descubrir a toda costa y que determinará tu futuro laboral, lo bien que te irá (si la encuentras) y tu felicidad.
En The Octopus Job, además de sorprendernos lo poco que se pone en duda, nos parece un consejo terrible.
Resetea: Algunas personas encuentran la vocación a lo largo de la vida, otras no llegan nunca a saber cuál es y, para algunas, la verdadera vocación no es una, sino varias. Si llegas a descubrirla, deberías entenderla como algo dinámico que podría evolucionar con el tiempo.
De todas formas, creemos que hay un enfoque más enriquecedor y menos estresante de combinar tus intereses sin tener que encajar en una idea que puede sentirse limitante: busca la satisfacción y que todo lo que quieras hacer tenga sentido para ti.
4. Si se te da tan bien, ¿por qué no vas a por ello?
Si algo se te da muy muy bien, lo lógico es que dediques todo tu esfuerzo en profesionalizarte o ser el mejor. De otra manera estarías desperdiciando todo ese potencial y eso sería un pena, ¿no?
Ya sabes…¿Se te dan muy bien las mates? Entra en una carrera técnica. Si tienes muy buen oído para la música, ¿qué haces que no estás en el conservatorio?
Resetea: Si tienes talento en algo y te dedicas a ello intensamente, está genial. Pero tú decides hasta dónde lo llevas. Lo importante de los talentos es disfrutarlos, no tratar de sacarles el mayor provecho o rendimiento.
5. Eres una persona indecisa y superficial
Cuando alguien cambia constantemente de intereses, proyectos y profesiones, lo común es que el mundo piense que se trata de una persona indecisa. Es más, el interesarse por muchas cosas diferentes también puede dar la impresión de que se pasa de forma superficial por las cosas sin llegar a dominar ninguna.
Resetea: Lo que desde fuera se percibe como indecisión, para un multipotencial es el motor de la curiosidad funcionando a tope. Cambiar de intereses tiene más que ver con la necesidad de explorar y nutrirse de diferentes experiencias que con la falta de un propósito. Siempre que te motive aprender y te apasione lo que estás haciendo, puedes llegar a ser muy competente en varias disciplinas.
Y lo que es más interesante y seña de identidad de un multipotencial: crear conexiones entre ellas.
6. No terminas lo que empiezas porque no eres constante
Las personas multipotenciales solemos cargar con la culpa de tener una mochila llena de proyectos inacabados o intereses que hemos ido abandonando por otros a lo largo del tiempo. Para tus allegados puede verse como falta de compromiso y para ti un síntoma de que hay algo roto en ti.
Resetea: No es el resultado, es el proceso. Lo que nos da energía como multipotenciales es saborear el camino que nos lleva de no saber nada a saberlo casi todo. A ti la idea de convertirte en un experto en la materia o ganarte el respeto por tener un título seguramente te deje frío.
¿Y si te pido que imagines la emoción de los primeros descubrimientos, la ilusión al contarlo a los demás, el entusiasmo al practicar lo que has aprendido o la confianza que crece al dominar una nueva habilidad? Ahí la cosa cambia, ¿verdad? Este es el proceso que te atrae.
7. Nunca vas a tener éxito si cambias de profesión
Si cambias de trabajo después de 5, 10 o 20 años dedicándote a lo mismo, estás tirando por la borda todo ese progreso, ascensos, experiencia e incluso tu reputación. “Eso es un error de los grandes”, pensarás.
Resetea: No te preocupes, ¡si en realidad lo del trabajo para toda la vida es de la época de nuestros padres! 😆 Bromas aparte, puedes cambiar de curro cuando quieras, y hacerlo con éxito. Como multipotencial deberías repensar qué es el éxito para ti. ¿Es tener más tiempo para desarrollar un proyecto paralelo?, ¿es tener más variedad en tu día a día? Piénsalo porque ese es el primer paso para construir un sistema de trabajo que funcione para ti.
Además, un multipotencial rara vez empieza de cero, te llevarás contigo todo ese aprendizaje de tu anterior profesión cuando empieces un nuevo camino.
8. Nunca vas a tener éxito si combinas varios curros
Muchas personas piensan que tener varios trabajos o proyectos profesionales cuando podrías dedicarte a tener un trabajo “estable” a tiempo completo es de pringados o, peor, de alguien que no tiene la cualificación suficiente para encontrar algo mejor.
La única manera de ser alguien es trabajar 8 horas seguidas al día durante cinco días a la semana, ¿no? Bueno, eso no está mal si quieres dominar una materia concreta y estar especializado.
Resetea: Hoy en día hay muchas formas de trabajo diferentes y maneras de configurar tu horario y tus proyectos para pagar las facturas. Lo importante si combinas varios proyectos es encontrar un equilibrio, ser realista con tu energía y estratégico con la forma de obtener ingresos.
9. Ese malestar se debe a que no acabas de “sentar la cabeza”
Si eres multiapasionado y además eres una persona con depresión, ansiedad o dudas todo el tiempo de ti mismo es fácil achacar las cosas a tu forma de ser: el estrés que te causa querer dedicarte a varias cosas o el hecho de que no encuentras tu camino único en la vida. Parece lo lógico, ¿no?
Resetea: Internalizar el mensaje social de que especializarte es el único camino hacia el éxito, tratar de encajar en esa idea o vivir en un entorno que no termina de reconocer tus fortalezas puede afectar a tu autoestima y a tu salud mental como multipotencial. Abordar esos desafíos es importante.
Aún con todo, no olvides que los problemas de salud mental pueden afectar a cualquiera y, con el apoyo adecuado, tanto multipotenciales como especialistas pueden prosperar.
10. Los multipotenciales son genios
Imagina una coctelera con varios ingredientes: una gran capacidad de aprendizaje, múltiples intereses sin relación aparente y un alto nivel de desempeño en algunos de ellos.
La agitas con fuerza y lo que encontrarás dentro será algo que puede confundirse un superdotado: una persona que parece tener un talento excepcional y una mente versátil.
Si eras de los multis que sacaban todo sobresaliente en el cole, esto te resultará familiar. Si de mayor destacas en varios temas, también.
Muchos creen que no tenemos dificultades ni limitaciones, y que podemos alcanzar el éxito en cualquier campo que elijamos. ¡Qué presión!
Resetea: Permitirte ser mediocre en algunos de tus intereses es muy liberador. Recuerda: se trata de disfrutar del camino. La mayoría no somos genios, solo personas curiosas, creativas y apasionadas por aprender. Ni mejores ni peores que nadie, vivimos en un mundo diverso.
Nuestra forma de verlo: crea tu propia narrativa
Ser multipotencial te da la posibilidad de explorar el mundo de una forma diferente.
Es una oportunidad para indagar en las distintas facetas de tu personalidad, de desarrollar diversas habilidades y conocimientos, de adaptarte a los cambios y desafíos del mundo actual, y de contribuir con tu creatividad e innovación a la sociedad.
No está nada mal empezar por cuestionar los mitos, las falsas ideas y comenzar a desarrollar una nueva narrativa sobre ti mismo. Una que valore tu forma de ser, que te permita integrar tus diferentes intereses y proyectos, y que le dé sentido a todo lo que te apetezca hacer.
¿Todavía no tienes claro si eres multipotencial? HAZ EL TEST y sal de dudas de una vez por todas.
